Estamos en el proceso de enseñarle a nuestros hijos a enfocarse en las soluciones y no en los problemas, es importante que recordemos lo valioso que es permitirles a ellos mismos identificar las consecuencias de sus actos.
Cuando abrimos la posibilidad de que exploren, los niños empiezan a buscar opciones por si mismos, deciden lo que es importante y lo que realmente quieren; de esta manera terminan enfocándose en las soluciones.
Cuando les imponemos un camino, limitamos su capacidad de reflexión, pues les decimos exactamente que fue lo que estuvo mal, que debería mejorar e incluso como se debería sentir.
La clave para nosotros los padres esta en preguntar en vez de imponer, hazle preguntas a tus hijos que los guíe en el proceso de reconocer sus errores, las consecuencias de sus actos y lo que pueden cambiar en un futuro.
Deja un comentario si cada vez mas permites que tu hijo proponga soluciones dentro de la familia.