La clave de una disciplina positiva, asertiva y amorosa es el respeto mutuo.
Si quieres que tu hijo sea una persona respetuosa, demuéstrale primero que él también merece respeto. Conviértete en un ejemplo.
Si tu hijo reconoce que merece respeto, será más fácil enseñarle que su familia, amigos, profesores y todas las personas también lo merecen.
𝐄𝐧 𝐥𝐚 𝐞𝐬𝐜𝐚𝐥𝐚 𝐝𝐞 𝟏-𝟓 (𝐞𝐧 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝟓 𝐞𝐬 𝐞𝐥 𝐩𝐮𝐧𝐭𝐚𝐣𝐞 + 𝐚𝐥𝐭𝐨) 𝐪𝐮é 𝐭𝐚𝐧𝐭𝐨 𝐩𝐫𝐚𝐜𝐭𝐢𝐜𝐚𝐧 𝐞𝐧 𝐜𝐚𝐬𝐚 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐞𝐭𝐮𝐨𝐬𝐚𝐬