Las preguntas son una forma que tienes de respetar el poder que tiene la otra persona de elegir, decidir y participar.
A veces en vez de preguntar a nuestros hijos, preferimos dar ordenes y esto puede llevar a luchas de poder y malos ratos.
Te propongo que en lugar de decir qué y cómo deben actuar las demás personas, incluyendo a nuestros hijos e hijas, podemos aprovechar las distintas situaciones para realizar preguntas que los inviten a la reflexión y a la participación.
Puede resultar difícil hacer este cambio de lenguaje pero ayuda a que los niños se sientan capaces de generar nuevas ideas y de aportar.
En vez de decir “vas a sacar una mala nota por no estudiar” podrías decir “¿qué necesitas para sacar adelante esta tarea?
Cuando preguntas, debes tener un interés genuino 💓de querer conocer lo que los demás piensan acerca de la situación porque de lo contrario podemos caer en conversaciones cargadas de juicios o críticas.
En casa ¿qué les resulta más fácil practicar dar órdenes o preguntar?
¿Qué crees son los factores que influyen para usar una o la otra?